MISION BABILONIA - Acción que atrapa
Foto: 20th. Century FoxMISION BABILONIA (Babylon A. D.) (USA/2008)
Intérpretes: Vin Diesel, Michelle Yeoh, Mélanie Thierry, Gérard Dupardieu, Lambert Wilson, Charlotte Rampling y elenco
Música: Alti Orvarsson
Dirección: Mathieu Kassovitz
Distribuidora: 20th. Century Fox – Duración: 90 minutos – Apta para todo público
Calificación: BUENA
El traslado a la pantalla de “Babylon Babies”, la novela de Maurice G. Dantec, viene convenientemente aderezado con increíbles toques de acción por el director Mathieu Kassovitz. El resultado es el vehículo ideal para que el pétreo actor Vin Diesel, con su voz de nicotina, asuma las constantes persecuciones y las coreográficas peleas que suceden al protagonista en un futuro próximo.
El argumento presenta a Toorop (Diesel) como un mercenario con códigos propios. En constante alerta, trata de sobrevivir en medio de ciudades superpobladas y signadas por la contaminación. Un nuevo desafío se presenta cuando Gorsky (Gérard Dupardieu) le encarga trasladar a una joven llamada Aurora (Mélanie Thierry) y su protectora, la hermana Rebeka (Michelle Yeoh), desde un monasterio en Kazajstán hasta Nueva York. El largo periplo los llevará a través de un campo de refugiados rusos, pasando por el estrecho de Bering, los helados páramos de Alaska y Canadá, y a eludir a un grupo que intenta abortar la misión. Toorop desconoce que la inquietante muchacha ha sido alterada genéticamente por su padre, el Dr. Darquandier (Lambert Wilson), y que su vientre lleva dos gemelos con el potencial de transformarse en ansiados Mesías para un mundo convulsionado. Por si fuera poco, la travesía se complica porque la Suma Sacerdotisa (Charlotte Rampling) quiere aprovecharlos de manera mediática. Ya se sabe; el que maneja la verdad, es dueño del poder.
En el género de acción, el filme cumple con su objetivo de entretener, gracias al apoyo de impecables rubros técnicos, un reparto impactante y el rotundo carisma de Diesel. Lamentablemente, la trama se precipita en una resolución tan rápida como poco creíble, que deja al descubierto los públicos problemas de producción y criterios estéticos que sufrió el rodaje.
Sin embargo, a nivel interpretativo, cabe destacar los trabajos de Yeoh (conocida por “El tigre y el dragón” y la reciente “La momia: la tumba del Emperador Dragón”). Y, claro está, la siempre inquietante, sugerente presencia de esa dama del cine, la británica Rampling.
