12 de febrero de 2009

OPERACION VALQUIRIA - La trama de un complot


Foto: 20th Century Fox


OPERACION VALQUIRIA (Walkyrie. EEUU,2009)
Intérpretes: Tom Cruise, Kenneth Branagh, Tom Wilkinson, Terence Stamp y elenco.
Dirección: Bryan Singer
Distribuidora: 20th Century Fox - Duración 120 minutos - Solo apta para mayores de 16 años.
Calificación: MUY BUENA

En la mitología nórdica, las valquirias eran dueñas y señoras de la muerte que servían al dios Odin. Su propósito era elegir a los guerreros caídos en las batallas y llevarlos al Valhalla, donde se convertían en guerreros aliados para llevar adelante la batalla final.
La figura de estas deidades fue tomada por el compositor alemán Richard Wagner para componer, a lo largo de veinticinco años, su famosa tetralogía El Anillo del Nibelungo. Su obra, de una profunda glorificación nacionalista, exalta, según los estudiosos, el antisemitismo. No en vano deploró la judaización del arte moderno (sic) en su libro "El judaísmo en la música".
Comandado por Adolf Hitler el nacionalsocialismo abrevó en la ideología racista imperante en su época y tomó la obra del compositor alemán como guía sonora de la mayoría de sus actos. A tal punto que el líder nazi denominó Operación Valquiria al plan estratégico de emergencia que posibilitaría estabilizar al gobierno en caso de su muerte.
Pero en la convulsionada Alemania de los años cuarenta, no todos estaban a favor de los métodos empleados por el Tercer Reich. Entre ellos el coronel Claus von Stauffenberg (Tom Cruise en un trabajo ascético impecable) que ama a su país y percibe con espanto las consecuencias de la previsible derrota. Aliado a un grupo de personalidades con influencia, decide llevar adelante la idea de asesinar al Fuhrer y suplantar en todos los puestos clave del gobierno y el ejército a los representantes del régimen de terror, valiéndose del plan que da nombre al film.
Con una reconstrucción de época milimétrica y ritmo de thriller, el director Bryan Singer (X-Men, X-Men 2, Superman Returns) y un elenco secundario de lujo, integrado en su mayoría por actores ingleses y alemanes, captura la atmósfera densa del nazismo y eleva al rango de héroes a Stauffenberg y sus secuaces en un film de visión obligatoria.